Hablemos de pechos y pezones
Rebotan, crecen, se encogen, se hinchan, cambian de color, se vuelven puntiagudos de repente y a veces duelen. Los pechos y los pezones son partes maravillosas de nuestro cuerpo y ya es hora de que hablemos abiertamente de ellos. Veamos su relación con el ciclo menstrual y otras causas de sus cambios.
Durante la pubertad puedes notar, junto con muchas otras novedades, que empiezas a desarrollar los pechos y tus pezones empiezan a oscurecerse ligeramente. Algunas de nosotras tendremos unos pechos grandes y llenos de vida, mientras que otras pueden parecer y sentirse más como pequeñas protuberancias en el pecho, ¡y ambas cosas son fabulosas! Además, todos tenemos pezones diferentes: pueden ser rosas, marrones, crema o morados y también pueden ser puntiagudos, planos o incluso invertidos. Nuestros cuerpos son completamente únicos y eso hay que celebrarlo.
Algunas personas prefieren ir sin sujetador por comodidad y otras prefieren el soporte de los sujetadores: es tu cuerpo, es tu decisión. Hay muchos tipos de sujetadores disponibles, desde los de encaje y sexys hasta los deportivos y cómodos. Pruébate unos cuantos y pide una prueba de sujetador para asegurarte de que eliges la talla correcta. Y recuerda que tu decides si quieres mostrar tus pechos y cómo hacerlo.
Los pechos suelen estar completamente desarrollados una vez terminada la pubertad, pero eso no impedirá que crezcan o se reduzcan también en el futuro. Vamos a investigar cómo pueden cambiar tus pechos y pezones y cómo cuidarlos.
¿Por qué me duelen los pechos antes de la menstruación?
Puede que un día te levantes y sientss que tus pechos están repentinamente sensibles e hinchados. Esto puede ocurrir todos los meses o quizá sólo de vez en cuando. En realidad, el dolor en los pechos justo antes de la menstruación (o en la segunda mitad del ciclo) es un síntoma muy común del síndrome premenstrual; incluso se les ha denominado "pechos de la menstruación".
Los "pechos de la menstruación" suelen ser dolorosos y pesados. Al ponerte tu sujetador habitual puedes sentirte asfixiada e incluso al moverte puedes notar una sensación de plenitud acompañada de un dolor sordo y pesado. La razón de esto es un cambio en las hormonas. Al igual que muchos otros síntomas del síndrome premenstrual, como los cambios de humor, los dolores de cabeza y la hinchazón, este cambio se produce por un aumento de los niveles de las hormonas sexuales femeninas: estrógenos y progesterona.
Puede que te encante el aspecto de tus pechos durante este periodo o que te moleste el dolor sordo; en cualquier caso, este síntoma debería remitir durante o justo después del periodo. Pero si el dolor es excesivo, ¿por qué no pruebas a ponerte un cómodo sujetador deportivo o a ir sin sujetador para aliviar la presión? Incluso puedes ponerte hielo en los pechos para reducir la hinchazón.
¿Por qué a veces me duelen los pezones?
No sólo pueden doler los pechos, sino también los pezones. Y debido a la forma exterior de algunos de ellos, los pezones pueden ser extremadamente sensibles y se irritan con facilidad.
Entre los factores externos que pueden causar dolor e irritación en los pezones se encuentran:
-Una alergia a un detergente para la ropa o a un tipo particular de material para la ropa
-La fricción producida por sujetadores o tops mal ajustados, especialmente si has hecho ejercicio y estás sudando
-Relaciones sexuales (los pezones pueden doler un poco si se juega con ellos con demasiada intensidad)
-Lactancia
-Además, los cambios hormonales (que implican un aumento de los niveles de estrógeno y progesterona) también pueden contribuir al dolor de pezones, de forma similar a los que afectan a los pechos justo antes de la menstruación.
Para aliviar cualquier molestia en los pezones, prueba frotarlos con un bálsamo o una crema hipoalergénica. Además, si eres propensa a sufrir rozaduras en los pezones durante la actividad física, también puede ser útil frotarlos con vaselina u otra pomada similar antes de hacer ejercicio. Y si sospechas que la culpa la tiene tu detergente, siempre puedes probar algunos nuevos hasta encontrar uno que no te irrite la piel.
Cómo comprobar si hay bultos en las mamas
Aunque muchos dolores de pezones y mamas son más molestos que algo por lo que preocuparse seriamente, en ocasiones pueden ser un signo de un problema mayor, como el cáncer de mama. También es probable que sea más grave si sentís dolor en un solo pecho o pezón.
Si te preocupa el cáncer de mama, hay algunos signos más evidentes a los que debes prestar atención, como la secreción del pezón o un bulto en la mama. Una buena forma de detectar cualquier bulto en el pecho es realizar un autoexamen. Sabemos que esto puede parecer una tarea más, pero los exámenes de mama no tienen por qué ser una molestia. ¿Por qué no pones tu lista de reproducción favorita para prepararte y te tocas mientras llevas a cabo tu rutina de hidratación corporal?
Aquí tienes unos sencillos pasos que debes seguir para asegurarte de que te haces la autoexploración mamaria con éxito:
-Para mayor comodidad y facilidad, es conveniente que te ponges delante de un espejo para poder ver bien tus pechos desde distintos ángulos.
-Observa tus pechos y pezones para ver si hay cambios en el contorno, hinchazón u hoyuelos en la piel.
-Utiliza las yemas de los tres dedos corazón para palpar todo el pecho y la axila. Presiona ligeramente, media y firme para comprobar ambos pechos cada mes y examinar si hay algún bulto, engrosamiento o nudo endurecido.
-Si encuentras algún cambio inusual, es mejor que te pongas en contacto con tu médico lo antes posible. Esto le ayudará a tranquilizarse si no se trata de un cáncer de mama, al tiempo que se asegura de que se puedan realizar más pruebas de inmediato si es necesario. Pero hay que tener en cuenta que los cambios en las mamas y los pezones pueden producirse por muchas razones y que la mayoría no son graves; después de todo, no se supone que los pechos sean completamente lisos o tengan la forma de círculos perfectos. Además, muchas mujeres tienen bultos en las mamas y sólo 1 de cada 10 veces son cancerosos.
Los pechos son una parte importante de nuestro cuerpo, incluso nos ayudan a avisar de la pubertad o de la llegada de la menstruación. Es justo que las cuidemos también, ¿no? Al fin y al cabo, cuanto mejor los conozcamos, más podremos apreciar lo que nos hace únicos y asegurarnos de que todo nuestro cuerpo esté sano.
Descargo de responsabilidad médica
La información médica contenida en este artículo se ofrece únicamente como recurso informativo, y no debe utilizarse ni utilizarse con fines de diagnóstico o tratamiento. Consulte a su médico para que le oriente sobre una condición médica específica.